Algunos de los problemas con las herencias y testamentos, ¿qué hacer?

Enfrentarse a la muerte puede ser un tema complejo para muchas personas. Pero lo cierto es que en algún momento de la vida se verán enfrentadas a ellas, y en España y la mayoría del resto del mundo, esto también significa enfrentarse a la burocracia propia de este momento en la vida de las personas. Desde el momento del fallecimiento, está el tema de las herencias y testamentos, impuestos, la solicitud últimas voluntades y el o los seguros. Estos temas pueden significar un gran dolor de cabeza, y lamentablemente no existe una sola forma de realizar los trámites, puesto que cada persona pudo o no haber dejado diferentes cosas para sus herederos.
Además, hay que tener en cuenta que, con testamento o no, no solo se heredarán los bienes, sino que también los derechos y las obligaciones. Este último punto es de especial importancia, ya que dentro de las obligaciones se encuentra, entre otras cosas, las deudas. Un heredero puede o no aceptar las deudas que vaya a recibir, pero también las puede dejar en pausa. Lo importante en estos casos es conocer todas las opciones, y poder tomar las mejores decisiones para cada caso.

Cómo el heredero puede hacerle frente a los problemas

Cuando las personas fallecen, ya es bien sabido que lo primero que sus parientes más cercanos deben realizar es solicitar certificado de últimas voluntades en una notaría, donde además pueden solicitar un registro especial para conocer si además era beneficiaria de algún seguro. Luego de esto se recomienda pagar el Impuesto a la Herencia en caso de corresponder, lo más pronto posible, ya que el plazo máximo para realizar este pago es de 6 meses.
Como fue mencionado, sin embargo, las deudas también son heredables, y lamentablemente un heredero no puede aceptar tan solo una parte de lo que le corresponde: es todo o nada. Afortunadamente, existe una herramienta de mucha utilidad, que es la de aceptar los bienes a modo de inventario. Esta modalidad de recepción de una herencia tiene unas características muy particulares y lleva por nombre recepción de la herencia a beneficio de inventario.
En el momento en el que una herencia es aceptada con las características de inventario, el heredero podrá subsanar todas las deudas que hubieran quedado pendientes con los bienes y derechos de la herencia misma, es decir, no comprometer su propio patrimonio. Esto es una herramienta muy útil cuando existe solo un heredero, pero, ¿qué ocurre cuando existe más de uno?
Cuando existe más de un heredero, sean cuales sean en la línea de sucesión, deben aceptar o renunciar a la herencia de forma unánime. En el caso en el que alguien no se pronuncie, se le puede interpelar notarialmente, después de 9 días del fallecimiento de la persona y tendrá un plazo de 30 días naturales para dar una respuesta.
Aceptar una herencia no es sencillo, sobre todo cuando existe más de un heredero y además no hay oportunidades de ponerse de acuerdo. Es por esto que aceptar la herencia a beneficio de inventario garantizará que las deudas puedan ser pagadas, y que además los herederos puedan recibir algo, aunque claro, cuando las deudas son demasiado grandes, a veces es mejor dejarlas y renunciar a aquello que hubiera correspondido.